Muchas gracias, por la alegría que tienen, muchas gracias por el esfuerzo que han hecho, muchas gracias por el camino que se han animado a realizar, y eso se llama heroísmo. Hasta los más chicos pueden ser héroes, los más jóvenes, cuando vienen engañados o se equivocan, se levantan y son héroes y van adelante. ¡Sigan adelante! ¡Sigan adelante, así! No se dejen vencer, no se dejen engañar, no pierdan la alegría, no pierdan la esperanza, no pierdan la sonrisa, ¡sigan así! y ahora les voy a dar una bendición a todos, le vamos a rezar a la Virgen, nuestra Madre, para que nos bendiga.
Ave María…